Por Josh (El Agente Especial) |
buena moraleja para los que quieren conservar su trabajo y evitar problemas con la
justicia. Gracias Agente!
Otro que perdió su trabajo por hacer bromitas inaceptables en su sitio de trabajo.
La historia que recientemente Mel nos narró sobre el Trini guagüero que perdió su empleo por darle una nalgada a una persona que resultó ser una mujer me hizo recordar la historia de Daniel (nombre ficticio), un ex agente que laboraba conmigo en el WTC.
Daniel y yo empezamos juntos, habíamos ido juntos a la academia para prepararnos como agentes especial del tesoro de EU, asignados al IRS. Ambos habíamos sido asignados en los mediados de la década del 90 a una fuerza mixta de agentes que se especializaban en la investigación de lavado de activos. La oficina de la fuerza mixta estaba ubicada en uno de los edificios del complejo del WTC. Danielito era famoso en la oficina por hacerle bromas a cualquiera, todos le celebraban sus bromas, y se reían a carcajadas con él. Como un ejemplo del tipo de bromas que este tipo hacía, en los días que la temperatura baja mucho, algunos agentes usaban un pesado abrigo de invierno que en la espalda tenia un letrero que decía en letras grandes POLICE. Los abrigos estaban diseñados para cubrir el letrero con un material de Velcro. A Danielito le cogió con destaparle a uno sin uno darse cuenta el material adhesivo que tapaba el letrero que decía POLICE. Algunas veces iba uno caminando por la calle con el abrigo que identificaba a uno como policía, y no lo sabia hasta que se quitaba el abrigo en el restaurant o al regresar a la oficina. Vainas de gentes media pendejas, pero eso a él y algunos los hacia gozar.
Un día del año 1999 (ya teníamos casi una década de experiencia), a Danielito se le ocurrió hacerle una bromita a otro agente que estaba en el sanitario de la oficina en el 6 WTC. La víctima de la broma estaba en una de las cabinas que proveen privacidad. Se le veían las piernas y el pantalón de una forma que demostraba que el tipo estaba sentado en el toilet hacienda alguna necesidad fisiológica. El chistecito Daniel activó un spray que contenía lo que se conoce como pedo mecánico, algo exageradamente hediondo y parecía el olor de un pedo bien hediondo. En eso entro al cuarto de baño un agente, quien pensando que se trataba de un acto terrorista con gas biológico (de aquellos que se esperaba que Sadam usara en la guerra del golfo). El agente reporto a los jefes lo que pasaba en el baño, y cuando los jefes se acercaban al baño para investigar, ya el olor a pedo mecánico se percibía afuera. Activaron la alarma, se contactó a los servicios de emergencia (911), y en menos de dos minutos llego allí medio mundo (equipos de la FBI, NYPD, bomberos, vans de los principales noticieros de NY, etc.) Es importante recordar que un tiempecito antes de eso unos musulmanes habían hecho un atentado terrorista en el WTC colocando un vehículo con explosivos en el parqueo subterráneo de las torres. Los que allí trabajábamos no eramos extraños a los atentados terroristas, y cualquier cosa ponía a uno medio nervioso.
Un par de horas después del chistecito de Daniel, cuando la breve investigación concluyó demostrando que era solo un pedo mecánico, algunos regresaron a trabajar y otros se fueron hacer algún trabajo para la calle para evitar el olor.
El jefe encargado de la fuerza mixta le dijo al jefe de Daniel que no lo querían jamas en el WTC, ni de visita. Daniel le informó a su jefe lo que había pasado, que fue una broma. Bueno, para calmar los nervios, a Daniel lo mandaron de regreso a la oficina del IRS en la calle Broadway. Como dos meses después del incidente nos enteramos que a Daniel lo tenían bajo investigación en la oficina de la fiscalía federal de Manhattan, al tipo lo querían enjuiciar por causar tan grande incidente, una le querían hacer una acusación de atentado de no sé que, la vaina es que lo quieren trancar. Daniel contrató un abogado que le negoció su renuncia sin que lo quieran enjuiciar. Así lo hizo, a Daniel no le quedó otra opción, renunció para evitar que lo despidan y que posiblemente lo tranquen.
Moraleja, quien suela hacer relajos en su trabajo, esta jugando con su arroz y habichuelas. A quien crea que se pueda beneficiar con un consejo, lo dejo con mi forma de pensar cuando aun yo trabajaba; hasta que el préstamo de mi casa este completamente pago, yo no me tomo el chance de perder mi trabajo. Bromear en su trabajo? No lo hagas
6 comments:
A Danielito nunca se la va a ocurrir ni de pensar en hacer otra broma y por suerte que el abogado negoció ese escape sin hacer tiempo en la cárcel.
Tio Agente ese aprendio su leccion bien si.
Oiga uno de los consejos q me dieron los brothers fue q me dijeron q no se relaja en el negocio porque por cualquier vaina le ponen una demanda al negocio y claro ustedes saben los otros consejos de q no se permite ni q piense en robar ni usar drogas.
Los de las mujeres me lo permitieron pero de meter manos fuera del negocio y q yo sea responsable de cualquier cosa que se me pegue.
Muy interesante el relato del Agente. Hay que saber discernir donde se puede hacer y a quien se le hace una broma
Daniel el travieso, asi como a todo pavo le llega su Accion de Gracias y Navidad, a los bromistas pesados le llega su dia. Como dice Rafael hay que usar el sentido comun a la hora de escoger persona y lugar para ciertas bromas pero es como que en algunos es mas fuerte el impulso de hacerse los graciosos. Gracias Jose por compartir la historia.
Varios meses despue de que Daniel el travieso dejara el trabajo lo vimos un dia. Creo que tuvo la suerte de conseguir una posicion con otra agencia del govierno. Lo que notamos todos los que lo vimos es que el tipo ya ni se reia, su semblante cambio por completo, y era de pocas palabras.
Jejeje!!!!!!!! Tal como le dije arriba ya ese ni inventa mas nunca y quien le hable de hacer una broma se lo va a conseguir como enemigo mortal!
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