Un ejemplo de nunca crean lo que ollen y ni lo que vean

Anécdota verídica de un caso de la vida real!
 Como siempre por protección y privacidad a sus identidades debo usar seudónimos y también para distinguir los personajes y las ciudades por el mismo propósito narrada en tercera persona. Esto no es un invento es algo real que pasó y quiero compartirlo con ustedes.

El Sr. Sánchez (un residente de Connecticut) recibe una llamada del Sr. Duarte (un criollo que como decimos no lo matan por $50 mil dolares-es un pariente cercano) quien le solicita que le haga el favor de transportarlo según él" "que le de una bola ida y vuelta para hacer una diligencia" a un lugar de un recorrido en autopista de 2 horas ida y regreso como desde una ciudad de Connecticut a Manhattan. Sánchez con mucho gusto deja sus planes a un lado para hacerle el favor a Duarte quien le informa que van 2 personas más para acompañarlo el Sr. Perez (un empleado privado con un buen sueldo y el Sr. Lopez (un simple obrero que le sacan el jugo en una factoría ganando el mínimo). Duarte le dice Sánchez que no se preocupe que le harán una colecta para la gasolina y por decencia este le contesta que no es necesario (La verdad es que él le había llenado el tanque con $65) para ese propósito de ida y vuelta pre calculado y es el presupuesto de uso de una semana para irse a su trabajo.

  Me cuenta Sánchez que los llevó y ya de regreso a Connecticut el amigo y los dos otros hombres se murmuraban para recolectarle algo de $ antes de salir del auto y que él (Sánchez) insistió en que lo dejaran así. Ya al desmontarse el Sr. Duarte sale y ni la mano ni las gracias le dio para despedirse de Sánchez y claro ni tampoco le dejó caer lo prometido y que los otros dos eran solo acompañantes el Sr. Perez  dijo "tenga esto" y le dejó caer en la oscuridad un billete y salieron.
 Luego se supo que quien  en verdad le pasó el billete de $20 a Perez fue Lopez que lo sacó su bolsillo no fue quien hablaba (Sr. Perez). terminó cooperando solo  quien menos podía el Sr. Lopez -el simple obrero de la factoría último en salir que se lo pasó a Perez y quien no cogió el crédito y solo era un acompañante de Duarte.

La moraleja de mi anécdota es el título de este post, NUNCA crean todo lo que ollen ni la mitad de lo que ven y esta es una prueba de eso.
Debo también mencionar  el notable gesto de algunos que hacen lo que pueden/ deben sin dejarle saber al mundo y que me dicen de la falta de gratitud, la tacañería de los otros?. Por eso es que digo que ya casi nada me sorprende casi lo he visto/escuchado todo.